Los textiles son los encargados de aportar un ambiente cálido y acogedor a una vivienda, además de vestir y crear infinidad de posibilidades a la decoración, su color, su textura, su diseño, su entramado y sus distintas combinaciones crean diferentes atmósferas y pondrán el toque definitivo al estilo de una estancia o vivienda. Por todo ello, la elección y coordinación de los diferentes textiles que arropan una vivienda no se pueden dejar al azar. Para no equivocarnos debemos seguir unos consejos básicos a la hora de su elección como, por ejemplo:
- Definir el estilo que se desea para la vivienda. Es importante pensar antes de escoger los textiles, el estilo que deseamos imprimir a nuestra casa. Por supuesto no es lo mismo ni tendrán, por tanto, el mismo estilo de textiles una vivienda clásica, que una moderna, una casa rustica que una minimalista, una vivienda femenina que una masculina.
- Elegir una paleta de colores que sea atemporal. Optar por combinar telas con distintos motivos y texturas, pero siempre manteniendo la misma paleta cromática, en este caso la elección podrá abarcar desde los beiges a los tostados, unos colores atemporales, serenos, cálidos y delicados, que no cansan ni aportan pesadez o fatiga visual. Dentro de este apartado se pueden incluir también los tonos tierra que, unidos a tejidos naturales, crearan un ambiente envolvente y ayudaran a realzar los matices de la madera presente en los muebles o el parquet, por lo que serán siempre una opción de moda.
- Elegir un color que sirva de base cromática. Se debe elegir un color que se considere como principal para que sirva de base y marque la pauta del ambiente que se desea crear, y en torno a él combinar distintos colores y estampados intentando que siempre que en su composición tengan un toque de ese color, para de este modo conseguir una combinación perfecta.
- Valorar el tamaño y medidas de la estancia, así como la luz que recibe. A la hora de elegir los textiles se debe tener en cuenta que en estancias pequeñas o que dispongan de poca luz natural, lo ideal sería escoger telas lisas, de colores claros y si se puede tejidos ligeros, por el contrario, si el tamaño de la estancia es grande y muy luminosa, se puede optar por elegir cualquier color o tipo de estampado, así como telas más pesadas.
Teniendo en cuenta estas pautas generales, las combinaciones pueden ser múltiples, según el estilo decorativo con el que se desea dotar a la estancia o vivienda. Para conseguir ambientes naturales, cálidos, serenos, que inviten a la relajación y al descanso, como es el caso de dormitorios, una combinación muy acertada es elegir telas en tonos blancos, beige o tostados. Las telas blancas dan mucho más juego de lo que en principio nos podemos imaginar. En el mercado existen muchísimas tonalidades de blanco, que van desde el blanco puro hasta el marfil o el blanco roto y con una gran variedad de texturas.
Si lo que se persigue es conseguir un ambiente romántico, tranquilo, alegre y luminoso, la combinación perfecta sería utilizar colores pastel como el rosa, salmón, azul celeste o el verde claro sobre una base blanca, para establecer así un contraste suave y luminoso.
Un estilo masculino estará marcado por colores sobrios como los grises, azul marino, tostados, marrones… y telas tipo sastre como los cuadros y la raya diplomática, mientras que un ambiente femenino estará marcado por tejidos donde predominen las telas floreadas y los tonos pastel.
Los pequeños cuadros vichy junto con estampados florales pequeños, además de tener mucha fuerza, encajan a la perfección en una casa ambientada en un estilo rústico. También pueden combinarse con rayas o pequeños topos. Para un estilo clásico se deben escoger telas más cuidadas que aporten elegancia y sofisticación como el terciopelo, el satén o la seda, combinadas con otras telas más suaves para no aportar demasiada pesadez o intensidad al resultado final. Los colores pueden ser verdes, granates, azules…
El espacio exterior de nuestros hogares, otro de los grandes olvidados
Decoramos nuestra vivienda para poder disfrutar de ella, del mismo modo que intentamos que su distribución y estructura se ajuste a la perfección a nuestras necesidades, por lo que a quien no le apetece una vivienda con un excelente espacio exterior o terraza donde disfrutar del sol y el aire libre. Y es que, si en el interior de un hogar es importante mantener la armonía, cuánto más en el exterior. Como nos recuerdan nuestros amigos de Cubiertas Estévez, ese espacio de nuestra casa está destinado a la relajación, a pasar tiempo con amigos, a disfrutar de unos rayos de sol… Por lo que debe tenerse también muy en cuenta a la hora de decorarlo, pudiendo utilizar también todos los consejos explicados en este artículo.
