Ahora más que nunca es de vital importancia la prevención de incendios forestales y es que en los últimos años estando viendo focos cada vez más virulentos en todo nuestro país, especialmente en Galicia, pero también en otros lugares como el vecino Portugal. En este sentido, la modernización de los medios de prevención y extinción es fundamental y hoy en día ya cuentan con cámaras termográficas, sistemas de detección precoz, drones para perimetrar y conocer el avance… Todo ello sumado a los clásicos helicópteros, hidroaviones, batefuegos, equipos de protección individual, motobombas, etc.
Así, la tecnología puntera también está cada vez más presente en nuestros medios de lucha contra la lacra de los incendios, pero nunca está de más recordar algunos de los consejos básicos que todos deberíamos de seguir para prevenir más fuegos.
- No abandonar residuos que puedan provocar un incendio. Abandonar residuos como botellas y objetos de cristal, que actúan como una lupa, papeles u otro material combustible puede acabar en tragedia. Fumar en el bosque o en sus alrededores es especialmente peligroso y no se deben arrojar colillas o cerillas, ni siquiera a la carretera por la ventanilla del coche ya que, además de acarrear una importante sanción, el viento puede transportarlas y activarlas.
- No hacer fuego en época de incendios. El 95% de los incendios forestales son provocados por el ser humano, en su gran mayoría por negligencias. Entre el 1 de junio y el 1 de noviembre es la época de mayor riesgo de incendios y, sobre todo, el mediodía y el atardecer y los fines de semana de julio y agosto. Cualquier pequeña chispa o llama pueden causar un desastre. Por ello, no hay que hacer fogatas o barbacoas ni quemar rastrojos o demás restos agroforestales.
- Cómo prevenir incendios forestales desde la precaución. En las zonas de riesgo de incendio hay que ser muy precavido. Es recomendable que en las viviendas de dichos lugares no se pongan setos de especies que ardan con facilidad como las arizónicas, cipreses, etc., no se construyan barbacoas en sus límites o no utilizarlas en los días de viento y de mayor riesgo, y depositar los residuos en los contenedores o vertederos habilitados. Además, una de las medidas para evitar los incendios forestales podría ser que los propietarios de las viviendas que se encuentren en zona de riesgo aprueben un plan de autodefensa. Esto se consistiría en instalar depósitos de agua e hidrantes en las calles, mantener los caminos aledaños despejados de vehículos y vegetación, etc. Las personas que salgan a la naturaleza deberían conocer bien el entorno y los diferentes caminos, no salirse de los lugares señalizados e intentar ir por zonas con visibilidad.
- Evitar el uso del coche o aparatos mecánicos. Los coches o cualquier otro vehículo de combustión deberían aparcarse en aparcamientos habilitados. O, al menos, en zonas despejadas de pastos o matorral. El tubo de escape en contacto con matorrales secos podría generar un incendio. Y no hay que utilizar desbrozadoras, motosierras o cualquier otro aparato mecánico que pueda provocar chispas o calor intenso.
- Invertir en gestión forestal. La prevención mediante una correcta gestión forestal evitaría los grandes incendios forestales. Es imprescindible actuar de manera directa sobre las causas que los provocan y evitar que se repitan año tras año. Es necesario una mayor inversión en selvicultura preventiva. La reducción de los incendios forestales pasa por el tratamiento y la gestión de nuestros bosques y paisajes naturales. Los trabajos de prevención, planificación y preservación resultan fundamentales para reducir el número de incendios forestales y, por tanto, su impacto en el entorno. Sin embargo, en ocasiones, esto no es suficiente por lo que Ibertronix ha desarrollado unos sistemas de detección de incendios con cámaras termográficas muy interesantes y útiles, ya que nos permiten detectar un fuego desde los primeros instantes de que este se produzca.
- Aumentar la concienciación ambiental. Las negligencias por parte del ser humano son una de las principales causas de los incendios forestales. Por tanto, concienciarse de los riesgos y las consecuencias de un incendio forestal puede ser la mejor forma de acabar con ellos. También es importante asumir una actitud activa y compartir con las personas cercanas los consejos para evitar un incendio, avisar a las autoridades públicas de vertidos en el monte y retirar residuos susceptibles de provocar un fuego, apagar bien fogatas abandonadas, etc.
- Aplicar la ley y aumentar los controles. La normativa medioambiental se debería aplicar en todo su rigor contra quienes provocan incendios forestales. Asimismo, se necesitan más medios humanos y técnicos para impedir estos delitos o, al menos, que no queden impunes. Además, hay que buscar maneras de extinguir este tipo de incendios con el menor impacto posible.
¿Cómo se ha de reaccionar al ver un incendio?
Si se ve un incendio o una columna de humo, el tiempo es vital, dado que es mucho más fácil sofocarlo en sus momentos iniciales que cuando ya ha crecido en tamaño y virulencia. En este sentido, hay que telefonear de inmediato al 112 de Emergencias o al 062 de la Guardia Civil, así como en autonomías como Galicia también podemos optar por el 085 que nos contactará directamente con Medio Rural, lo que supone el cauce adecuado en estos casos. Además, es imprescindible dar el mayor número de datos posibles sobre la situación y para que el incendio no nos dañe, es esencial huir lo más deprisa posible en contra de la dirección del viento o por un lateral. Nunca debemos hacerlo ladera arriba ni hacia barrancos u hondonadas, sino buscar un claro. Por su parte, si se va en coche, lo mejor es cerrar las ventanillas y si se colabora en las labores de extinción, no hay que quedarse solo y hacer siempre caso a los expertos o personal autorizado.